Según datos del índice sobre libertad económica en el mundo que elabora el Fraser Institute, España ocupa el puesto 118 de 159 países analizados en materia de regulación del mercado laboral.
A nivel general, por libertad económica estamos en el puesto 49, pero suspendemos claramente en lo referido a libertad en el mercado laboral.
Para medir el nivel de regulación del mercado laboral se analizan las normas de contratación y despido, las regulaciones de horas de trabajo, la existencia de un salario mínimo, los costes de indemnización en caso de despido y el grado de centralización de la negoción colectiva.