El diario El Mundo ha publicado un tribuna de Alfonso Pinilla, profesor de Historia Contemporánea de la Universidad de Extremadura, en la que critica a los nacionalismos por considerar que apuestan por soluciones locales a problemas globales que resultan, por tanto, «ineficaces e insignificantes». Para acceder al texto completo, pinche aquí.
Según el profesor, «El nacionalismo separatista catalán dibuja como enemigo a España y persigue como sueño la independencia. Una amenaza y una ilusión son los mimbres de este proyecto excluyente que niega, en aras de la uniformidad cultural, ideológica y lingüística impuesta de puertas adentro, la manifestación de la natural diversidad de pensamientos y actitudes instalada en cualquier grupo humano».
La España de hoy, en opinión de Pinilla, hace que el nacionalismo catalán carezca de sentido, pues se trata de una nación en la que «la Constitución de 1978 consagra el principio de la unidad en la diversidad, inspirador también del proyecto integrador europeo nacido tras la Segunda Guerra Mundial».
«Admitiendo que el modelo de financiación autonómica merece un estudio y posible replanteamiento, lo indiscutible es que la España de hoy no castiga la diversidad sino que la premia, considerándola condición indispensable de un edificio común que persigue, acertadamente, integrarse cada vez más y mejor en Europa», afirma este profesor.