Carlos Conde de Solares, profesor de Historia de España, escribe en El Mundo que el nacionalismo catalán ha seguido reforzando durante los últimos años su red de desinformación en el exterior, sin que el Gobierno haga nada por evitarlo.
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Esa red está extendida también en el ámbito académico, para tratar de justificar el secesionismo y desprestigiar la democracia española.