Nicolás Redondo Terreros propone en un artículo de opinión publicado en el diario El Mundo que los partidos constitucionales suscriban un acuerdo por el cual se comprometan a que cualquier modificación de la Carta Magna y de los estatutos de autonomía sólo pueda hacerse previo consenso de los partidos nacionales, una política común para Cataluña y prescindir de los votos nacionalistas.
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De ese modo se lograría frenar a los partidos independentistas y conseguir que dejasen de condicionar la política nacional.