Gonzalo López Alba ha publicado una columna en El Confidencial en la que destaca que los partidos políticos han perdido en los últimos años su función primordial, que es la de ser útiles socialmente, circunstancia que explica su descrédito actual. Para acceder al texto completo, pinche aquí.
Según este periodista, «los políticos han dejado de ser configuradores del acontecer» y han convertido su actividad en un mero teatro.
Los políticos viven en una campaña permanente «que describe los problemas, incluso los analiza, pero nunca los resuelve. Algunos incluso los crea».
Y concluye con una cita de Ortega y Gasset: cuando los ciudadanos caen en la indiferencia, “en vez de conseguir la democracia que se merecen, los votantes terminan pagando el precio de su propia desilusión y solo obtienen la democracia que sus políticos les imponen”.